La primera gran novedad de esta nueva versión del clásico infantil, es que ciertos ecos de romanticismo y atracción física entre el héroe y la bella Wendy han sido recuperados. Sin embargo, este filme con actores de verdad sigue siendo un producto para todo espectador y, de hecho, califica como uno de los grandes estrenos familiares del último tiempo. La premisa es archiconocida: persiguiendo su sombra, Peter Pan se cuela en el dormitorio de los chicos Darling. Así se hace amigo de ellos (sobre todo de Wendy) y los invita a conocer la Tierra de Nunca Jamás, donde deberán enfrentar los trucos de un Capitán Garfio más perverso que nunca.
Los decorados y los efectos son de primer orden, pero es el amor a la fuente original (el libro de J.M. Barrie) y a las múltiples lecturas del mito del niño que se niega a crecer lo que le da categoría de miniclásico a este filme. Otra perla del australiano P.J. Hogan
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